Patrón del Consejero
Emociones: Es fácil de abordar, afectuoso y comprensivo
Meta: La amistad; la felicidad
Juzga a los demás por: Su aceptación positiva; generalmente busca el lado bueno de las personas
Influye en los demás mediante: Las relaciones personales; al practicar la política de “puertas abiertas”
Su valor para la organización: Estable, predecible; una amplia esfera de amistades; sabe escuchar
Abusa de: Acercamiento indirecto, tolerancia
Bajo presión: Se torna demasiado flexible e íntimo; confía demasiado en todos sin distinción
Teme: Presionar a los demás; que se le acuse de hacer daño
Sería más eficaz si: Prestara más atención a las fechas límite; tuviera más iniciativa para realizar el trabajo
El Consejero
tiene el don particular de resolver los problemas de los demás. Impresiona con
su afecto, empatía y comprensión. Al Consejero le es fácil encontrar lo bueno
en las personas y asume una actitud optimista. El Consejero prefiere tratar con
la gente sobre la base de una relación íntima. Al saber escuchar, en especial a
los problemas, es directo en sus sugerencias y no trata de imponer sus ideas a
los demás.
El Consejero suele ser extremo tolerante y paciente con las personas que no rinden en el trabajo. Bajo presión, se les dificulta confrontar los problemas de desempeño en forma directa. Suele ser demasiado indirecto para ordenar, exigir o disciplinar a otros. Con su actitud de que la “gente es importante”, el Consejero suele dar menos importancia al rendimiento. En ocasiones requiere ayuda para fijar y cumplir fechas límites realistas. A menudo, el Consejero toma la crítica como una afrenta personal, pero responde en forma positiva si recibe atención y cumplidos por un trabajo bien hecho. Cuando tiene un puesto de responsabilidad suele prestar atención a la calidad de las condiciones de trabajo y proporcionar reconocimiento adecuado a los miembros de su grupo.