Las empresas exitosas trazan su futuro con estrategias creativas y efectivas, vigilan su desempeño con indicadores y miden sus rendimientos a través del logro de metas y objetivos clave. Si bien abundan las planeaciones estratégicas en los negocios, aun no le queda claro a todos quién es el responsable de qué y cuáles son los roles de cada nivel, para lograr ser una empresa orientada en la gente y en el desempeño, es decir orientada a la ejecución de la estrategia.
Problema:
A pesar de que las empresas tienen clara la estrategia cada uno de sus departamentos o divisiones, continua empeñado en cumplir con sus propias prioridades y sin lograr los niveles de desempeño y cumplimiento de metas.
Esta aportación, aborda el reto de clarificar los roles y las actividades de los niveles de una organización y su responsabilidad para diseñar y ejecutar una estrategia de negocio exitosa. También mostraremos la necesidad de alinear la visión con el quehacer diario de la organización.
Para fines prácticos e ilustrativos, dividiremos a una organización en 3 niveles; el organizacional dónde se encuentra la dirección estratégica de la empresa; el nivel departamental o divisional en donde se encuentra la administración de las funciones que une la estrategia y la operación; por último el nivel de equipos donde se encuentran las personas, los procesos y la tecnología, lo que a veces llamamos la operación y/o producción de la empresa.
El Nivel de organización es el responsable de:
- Crear la estrategia de negocio y definir las áreas de enfoque
- Comunica a todos la estrategia definida
- Proponer las metas y evaluar el desempeño de la organización
Nivel de departamento o división es el responsable de:
- Planear y establecer los objetivos
- Administrar la ejecución de los planes
- Comunicar los planes, objetivos e indicadores de desempeño
- Retroalimentar y corregir el desempeño
Nivel de equipo de
trabajo
- Ejecutar los planes y vigilar sus indicadores
- Comunicar y reportar los resultados
- Aprender y mejorar en forma continua
Para complementar lo anterior podemos afirmar, que la planeación se hace de arriba hacia abajo, es decir desde el nivel más alto de la organización llegando hasta cada uno de los equipos de trabajo. La ejecución se hace de abajo hacia arriba, es decir, desde los niveles de equipos de trabajo hasta llegar con los resultados a la parte más alta de la organización. La alineación positiva se logra con la comunicación y clarificación de las estrategias y áreas de enfoque, tomando las metas de negocio como un lugar al que hay que llegar y cada uno de los objetivos establecidos como la medición que nos apoyará a medir el logro y el cumplimiento de la estrategia.
Solución: Una excelente estrategia de negocio se logra con la alineación positiva entre la planeación y la ejecución, siempre en una relación directa de administración del desempeño y una fuerte comunicación total.
@jesusgaxiola
Felicidades, excelente tema bien planteado personalmente creo también hace mucha falta liderazgo en las empresas y sus directivos y una comunicación clara eficientaria el Target
Gracias por el comentario. Se trata de hacer lo complicado (cómo lo es una planeación estratégica) más sencillo para los empresarios. Y de acuerdo, el liderazgo es la base de todo y debe estar presente en todos los niveles de la organización, no solo en los jefes.
Muy de acuerdo en lo que dice sobre «El liderazgo es la base de todo y debe estar presente en todos los niveles de la organización, no solo en los jefes.»
Si bien, hacer una planeación estratégica como usted ha mencionado en algunas ocasiones, es una tarea complicada. Sería interesante ver como un líder de una una empresa grande podría conocer las inquietudes de sus colaboradores, desde los niveles más altos a más bajos, el conocer indicadores actuales y objetivos por alcanzar, ¿cómo le haría para saber cuáles son los motivos de que no los alcancen? y ¿cómo haría realidad ese plan en ese caso? veo aquí porque sería difícil mas en una empresa “grande”.
Había visto el caso de Facebook, que Mark Zuckeberg para conocer inquietudes o cosas que pasan en la ejecución Mark no acude a los jefes de área, sino que se acerca a sus colaboradores de menor nivel en grupos pequeños a charlar de cómo les ha ido en la empresa. Esta acción siento que les da más valor a los colaboradores, ya que los hace sentir que son importantes y tomados en cuenta.
En este caso brinca varios niveles para llevar una planeación de estrategias, pues quien más va a saber cómo están las cosas en el campo de batalla que el que está al frente de las batallas en una guerra que el soldado raso.
Como digo sería interesante como otras empresas llevan a cabo estas generaciones de estrategias, imagino que cada quien tiene su toque innovador y creatividad en vez de seguir un instructivo genérico por varias empresas en cómo generar estrategias, pues no le vería lógica, ya que todos sabrían las bases de las estrategias de sus competidores. Creo que en empresas maduras cada quien tiene su método para generarlas.
Por otro lado, las personas son difíciles de manejar, no querrán descuidar su trabajo por hacer un proceso extra, como la elaboración de un plan estratégico, este requerirá de varios recursos, pero tarde que temprano una vez realizado generaran mejores ventajas competitivas, un macro proceso más eficiente o alineado.
La mayoría de las PyMES creo que se conforman con sacar el día y nada más, no gustan por tener o formalizar sus estrategias de negocio, solamente se basan en especulación y observación de sus entornos. Quizás sea por limitantes que impiden elaborar, contratar o tener acceso a consultorías que ayuden a elaborar estos planes.
Tomando como base el problema planteado, como dice “propias prioridades” cada quien dedica recursos a lo que cree que es más importante realizar, cada área en una empresa dirá que su área es la más importante, desconociendo que es lo que hacen los demás, querrán alcanzar el propósito general con su aporte, mas no estarán apoyadas unas a otras eficientemente. Creo aquí que es importante conocer los objetivos de cada una de estas, tenerlas a la mano y ver si una tiene sinergia con otra para establecer un orden sobre las prioridades, quizás teniendo un orden llevar a cabo un objetivo dará como resultado la facilitación de llevar a cabo el segundo y así sucesivamente.