En la semana, alguien me preguntó por twitter que si en qué consistía el Design Thinking y quién lo debe utilizar; me puse a pensar que aún hay mucho trabajo por hacer respecto a la promoción de la creatividad y de la creación en la sociedad y en la industria.
Para empezar, quiero definir qué es el Design Thinking, es una metodología (que tiene características de las metodologías ágiles) para la resolución de problemas aplicable a cualquier ámbito, con un objetivo centrado en lograr innovación colaborativa a través de equipos de alto rendimiento; también puedo mencionar que requiere que todo el equipo adopte un enfoque en el desarrollo creativo y basar las soluciones en una observación profunda de las necesidades de los usuarios.
Durante los talleres del Design Thinking el equipo adopta y aplica varias actitudes y técnicas sencillas, por ejemplo.
La empatía que obliga una reflexión y observación profunda de las necesidades de los clientes o usuarios, desde el punto de vista de las emociones que experimentan al tener contacto con nuestro producto o servicio. (Mapa de empatía)
La creatividad para la búsqueda “optimista” de soluciones posibles y contrasta lo deseable contra lo posible. (Pensamiento divergente, lluvia de ideas). + info
El prototipado colaborativo para lograr visualizar y explicar posibles alternativas de solución. (Prototipado rápido, lean canvas, business model canvas)
El Aprendizaje continúo ya que cada validación final de los prototipos te permite una retroalimentación constante. (Técnicas de validación)
Es una metodología iterativa es decir el proceso de observar, idear, crear, prototipar y validar se repite cuantas veces sea necesario, para aprender en cada paso, hasta encontrar la mejor solución.
El Design Thinking abre las puertas a las humanidades y a los humanistas para participar activamente en la solución de problemas de forma innovadora, es decir menos tecnología y más interés por comprender la cultura, el contexto y las personas; también estimula el uso del lado creativo del cerebro. El Design Thinking es colaborativo y multidisciplinario, reconoce e incluye el valor del conocimiento vivencial, y no solo el de los expertos o de los números estadísticos de estudios de mercado.
Recomendable 100% para los equipos de empresas, empresarios, emprendedores, gerentes, estudiantes, en fin para todos.
Tienen que vivirlo para entenderlo e iniciar aplicarlo.
JG
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