En la era de la Inteligencia Artificial (IA), la educación superior enfrenta el desafío de adaptarse a un entorno en constante transformación. No solo se trata de incorporar tecnologías avanzadas, sino de replantear los enfoques pedagógicos y administrativos para maximizar su potencial. La IA está cambiando la gestión educativa, empoderando a los docentes y mejorando los procesos de enseñanza-aprendizaje. Además, debemos considerar la importancia de preparar a los futuros profesionales para un mundo en el que la IA será clave para el éxito laboral y personal. En este contexto y en mi experiencia docente, creo que es crucial que las instituciones académicas adopten estrategias proactivas y visionarias en pro de permanecer vigentes y de egresar profesionistas preparados para adaptarse y enfrentar el cambio.
La IA al servicio de la gestión y la implementación de la educación.
El sistema educativo tendría que conocer y aprender a utilizar la IA como una herramienta de gestión de las actividades relacionadas con la educación universitaria; es importante reconocer como la IA puede impactar en las funciones administrativas y creativas para mejorar la productividad del sistema educativo en su conjunto. Un ejemplo podría ser apoyar a los educadores en la creación de nuevas opciones de programas educativos, acelerar los procesos de desarrollo académico administrativo para que el Sistema Educativo Universitario sea más ágil para responder a los dramáticos cambios socioeconómicos y culturales.
La IA al servicio del empoderamiento de los docentes y su enseñanza.
Otra área estratégica a considerar dentro de los impactos que tiene la IA en la educación es el rol que tienen los docentes en el proceso educativo. El cambio inicia por la personas y los docentes deben repensar como la IA podría apoyar a su labor educativa. Los docentes tienen que ser habilitados en temas de IA relacionados con la docencia y empoderarlos para crear los ambientes de aprendizaje que impacten en el proceso de enseñanza aprendizaje
La IA al servicio del aprendizaje y de la evaluación de los resultados.
La evaluación, la autoevaluación y la retroalimentación del aprendizaje son labores fundamentales en el proceso de enseñanza-aprendizaje, con esta premisa podemos inferir que cualquier herramienta que pueda ser incorporada ayudará a mejorar la calidad del proceso y la IA representa una ventaja competitiva especial relacionada. Estoy seguro que cuando los docentes la conozcan y se habiliten darán cuenta de la capacidad que tiene la IA para impactar en el proceso de enseñaza-aprendizaje.
El desarrollo de las competencias profesionales necesarias para la vida y el trabajo en la era de la IA.
Toda nueva tecnología incorporada a la sociedad genera un impacto positivo y negativo en nuestra vida diaria y el desarrollo de la IA no es la excepción; la facilidad de acceder a las plataformas de IA generativa, su interfase intuitiva y sencilla ha generado un indice de adopción exponencial por parte de las personas en el mundo impactando en los hábitos y costumbres de toda la sociedad, especialmente en la educación y el acceso a la información. Es necesario repensar las normativas necesarias para adoptar de manera ordenada las IA y claro será necesario incorporar estas competencias profesionales a todos los integrantes (Personas) de la cadena de valor de la educación universitaria. No tengo ninguna duda que utilizar la IA en la vida laboral será una competencia profesional indispensable, es responsabilidad del sistema educativa universitario en su conjunto preparar a los estudiantes para enfrentar el trabajo del futuro.
La IA como modo de proporcionar a todos posibilidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida.
El cambio sucede y seguirá sucediendo y afecta a todo el sistema social, económico, cultural de la humanidad, pero la adaptación a ese cambio es nuestra responsabilidad. La IA ha transformado la formas en la que accedemos a la información, al conocimiento y al aprendizaje. El sistema educativo debe tener claro que, con la IA el aprendizaje para la vida y de por vida, se posibilita de una manera sustantiva. Es deber del propio sistema educativo universitario y de sus actores prepararse para enfrentar los cambios futuros desarrollando hoy las competencia de aprender a aprender en cada uno de nuestros estudiantes, con eso, aseguramos las posibilidades de lograr el aprendizaje a lo largo de la vida.
Para finalizar, puedo comentar que los cambios que producirá la IA en educación serán graduales y no en forma de “shock”, pero no serán menores, algunos ya los estamos viendo y sufriendo en cada aula de clases de las universidades del mundo; la IA ya está impactando en la labor docente de las aulas universitarias, los docentes ya la estamos enfrentando, ya hay presión en las universidades para reaccionar y considerar el fenómeno de la IA no como una moda pasajera, si no más bien como algo que llegó para revolucionar la forma de educar y gestionar el sistema educativo. Es necesario considerar la IA en el sistema educativo como un movimiento estratégico, como una ventaja competitiva potencial, se debe considerar la necesidad de habilitar con competencias profesionales necesarias a las personas que intervienen en el proceso enseñanza aprendizaje (docentes, estudiantes y administrativos), se deben pensar en establecer las políticas, lineamientos académicos necesarios para incorporar las IA al modelo.
El cambio sucede y sucede rapido pero la transformación y adaptación es nuestra opción estratégica el sistema educativo debe esperar o debe actuar, debe quedarse como está o debe adaptarse. Ya veremos, el tiempo colocará en su lugar a cada quien y cada universidad.
Jesús Gaxiola
@jesusgaxiola
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