Si por un momento nos detenemos a pensar en cómo es un aula de una universidad en México, ¿cómo la imaginamos? si cerramos los ojos y nos concentramos veremos, un profesor hablando al frente o escribiendo, alumnos, varias hileras de sillas individuales una para cada alumno, un pizarrón, borrador y si ya es muy avanzada una computadora, cañón proyector y material en powerpoint proyectándose.
La forma de educar no ha cambiado
Desde hace años (si no es que siglos), el modelo de enseñanza no ha cambiado, no ha evolucionado, el problema principal es que los alumnos si han cambiado, ellos han evolucionado, las herramientas han cambiado y los alumnos tienen otras expectativas de los métodos que utilizamos los profesores para enseñar, evaluar y las herramientas necesarias para hacerlo. Muchos de los conocimientos y técnicas que el profesor transmite a los alumnos, ellos ya las encuentran en internet mejor explicadas y documentados, muchos de los cursos que impartimos los profesores durante 15 semanas en el aula, ya están disponibles en cursos online que pueden tomarlos al ritmo que el alumno quiera en menos tiempo si es necesario.
Entonces los profesores y la universidad ¿qué tenemos que hacer?
El rol de todos los profesores debe cambiar, en mi visión el profesor debe convertirse en maestro para los alumnos, varios aspectos deben evolucionar en la forma de educar.
- La investigación debe mantenerse, pero la deben hacer los propios alumnos, deben aprender a buscar información requerida para solucionar un problema. Basta de que el profesor hable y hable y hable sobre las técnicas y teorías. Debe resolver dudas acerca de su uso.
- El maestro debe diseñar actividades de enseñanza para unir la capacidad de análisis y la creatividad, debemos motivar a los alumnos a usar ambas partes del cerebro en la solución creativa e innovadora de problemas.
- Debemos educar para que los alumnos desarrollen las habilidades suaves (también llamadas Soft Skill´s), ahora todo se realiza en equipo, la actividad individual es importante pero el detonador del conocimiento es la colaboración y co-creación. Para eso es fundamental las habilidad suaves.
- El maestro debe transmitir su experiencia profesional al educar, más que su conocimiento, por lo tanto es necesario que el profesor trabaje en proyectos reales del sector en el que se especializa; el profesor debe conocer y participar del entorno empresarial para poder educar y guiar al alumno al integrarse al mundo de laboral.
- Motivar la creación de espacios creativos en cada aula en la que imparte clase, en lugar de espacios de transmisión de conocimientos uni-direccionales que hasta el momento nos ha dado como resultados en su mayoría alumnos grises y aburridos. Motivemos los debates, discusiones, creatividad, diversión y el descubrimiento.
Posiblemente haya más factores, más aspectos para lograr educar mejor a los alumnos en las universidad, pero si logramos que los alumnos armen el rompecabezas y tengan ideas propias estaremos dando un paso hacia la educación y la forma de educar pertinente. Dejemos que los alumnos tengan ideas, dejemos que se equivoquen y fracasen, no podemos seguir guiando la forma de aprender de los alumnos, dejemos que ellos descubran, dirijan e integren su conocimiento y experiencias para lograr educarse. Educar para tener ideas.
Se que hay muchas personas entusiastas, científicos y profesionales de la educación están ya trabajando para cambiar el paradigma actual; queremos lograr mejorar las escuelas y en particular cambiar radicalmente la forma en las que se enseña y educa. Sigamos adelante, pero es necesario acelerar el paso. Nos estamos quedando atrás. Nos estamos quedando sin alumnos creativos.
Maestros, con la educación debemos estimular la inteligencia y la creatividad del alumno, más que estimular la memoria y la calificación.
JG